Beneficios de salir a correr en ayunas

Pincha aquí para ver el índice de temas de este contenido

El mundo del fitness no está exento de modas que vienen y van. Junto al ayuno intermitente, otra popular es salir a correr sin haber desayunado antes, con el argumento de que permite disfrutar de múltiples beneficios. Pero, ¿es realmente cierto? En este artículo, arrojamos un poco de luz sobre este tema tan actual. 

¿Cuál es el argumento para salir a correr en ayunas?

Salir a correr en ayunas consiste en entrenar por la mañana sin haber ingerido nada antes. Cuando esto sucede, el organismo no tiene en su haber ninguna reserva de glucógeno, que es la principal fuente de energía que nuestro cuerpo utiliza y que se obtiene sobre todo de los hidratos de carbono. 
Los niveles que se tienen por la mañana cuando nos levantamos, no solo están condicionados por el desayuno o su inexistencia, sino que también influye lo que se ingirió en la cena. Como sucede con el resto de prácticas en el ámbito del deporte, es importante hacerlo de forma controlada, puesto que siempre hay un impacto directo en la salud. 
Cada persona tiene una condición física determinada y unas características fisiológicas, que les pueden predisponer para beneficiarse más o menos de prácticas como esta. Por esta razón, antes de dejarse llevar por la tendencia, hay que preguntarse para qué se apuesta por ella y si realmente tenemos el perfil para obtener los beneficios prometidos. 

Beneficios de salir a correr en ayunas

Para entender el funcionamiento del organismo, vamos a conocer los beneficios de correr en ayunas y después los inconvenientes. Ambos están muy relacionados, por lo que nos ayudará a obtener una visión completa de lo que sucede. 

Oxidación de grasas

Se suele hacer referencia a la oxidación de grasas como a una quema de las mismas, pero no son conceptos equivalentes. La oxidación es la capacidad del cuerpo para utilizar las moléculas de ácidos grasos con rapidez y así obtener energía. Al no haber reservas de glucógeno, el organismo utiliza estas. Sin embargo, si no hay un control, que implica valorar la edad, el sexo y el estado de forma física, puede implicar también la pérdida de masa muscular. 

Aumento de la sensibilidad a la insulina

Salir a correr sin haber desayunado incrementa la sensibilidad a la insulina en el organismo. Por lo tanto, se mejora el control de los niveles de azúcar en la sangre. Cuando se eleva esta sensibilidad, se reduce el riesgo de que aparezca diabetes tipo 2 por la resistencia a la insulina. 

Desafío mental

Si tenemos por costumbre ingerir alimentos por la mañana, que debería ser así, es normal experimentar hambre o cansancio mientras se hace deporte en ayunas. Esta sensación hace que el entrenamiento se convierta en un desafío, por lo que se convierte en una prueba mental. 

Inconvenientes de correr en ayunas

Pero como decíamos, no todo son beneficios, y en algunas personas, estos se convierten en un problema. 

Aumento del riesgo de hipoglucemia

Controlar los niveles de azúcar en la sangre es beneficioso para quienes tienen valores normales o elevados. Sin embargo, cuando hay propensión a que los valores sean bajos, se puede caer en una hipoglucemia, es decir, que estos desciendan drásticamente y provoquen mareos y debilidad. 

Menor rendimiento

Los músculos utilizan principalmente la glucosa de los hidratos de carbono para rendir. Parecer ser que correr en ayunas provoca adaptaciones en las células musculares y aumenta la capacidad para almacenar glucógeno, pero estos cambios serían interesantes cuando se entrena a una intensidad moderada y para quienes practican deportes de resistencia. Para el grueso de los mortales, la consecuencia será sentir cansancio y rendir menos. 

Pérdida de masa muscular

Cuando hay escasez de recursos, nuestro organismo utiliza todo aquello a lo que tiene acceso para poder seguir realizando sus funciones vitales. Aquí también entra el uso de la propia musculatura, cuyas proteínas se descompondrían para obtener energía. Es decir, que abusar de los ayunos al salir a correr podría hacerte perder la masa muscular. 

Entonces, ¿es bueno salir a correr en ayunas o no?

Llegados a este punto, hay que volver sobre la pregunta inicial que planteamos y es la de para qué apostamos por esta práctica. Si lo que quieres es perder peso, saltarte una comida no te ayudará; lo que necesitas es un déficit calórico. Es decir, ingerir menos calorías de las que consumes, no pasar hambre o prescindir de una comida. Además de experimentar fatiga y mareos, es probable que después de entrenar tengas muchísima hambre y acabes comiendo el doble. 
En segundo lugar, si eres deportista profesional o practicas deportes de resistencia, como carreras de larga distancia, convendría obtener asesoramiento para conocer la frecuencia y la intensidad que te permitirán beneficiarte del ayuno. Si deseas ganar masa muscular o rendir al máximo, esta práctica no te ayudará. Además, si tienes la presión baja, niveles de azúcar bajos, estás embarazada o en lactancia o padeces trastornos de la conducta alimentaria, tampoco está recomendado. 
En definitiva, escucha a tu cuerpo y, si necesitas asesoramiento, profesional, en Olimfit podemos ayudarte

Artículos relacionados