Si sabes que quieres ponerte en forma y deshacerte de algunos kilos, pero no te terminan de convencer los gimnasios y las clases dirigidas dentro y fuera de estos, hoy te proponemos otra opción: el jogging. Solo necesitas una media hora algunas veces en semana y el compromiso para seguir nuestros consejos para empezar a correr para bajar de peso.
Consejos si quieres correr para bajar de peso
Como con cualquier otra actividad deportiva, los resultados nunca se ven a corto plazo. Ten en cuenta que tu cuerpo tiene que adaptarse, y que además el resto de hábitos que tengas también influyen. Por ejemplo, si sales a correr y luego por el cansancio ingieres el doble de calorías de las habituales, podrás incluso subir de peso.
Del mismo modo, al correr para bajar de peso, debes hacerlo con un mínimo de intensidad. Es decir, que tiene que ser un reto durante parte del entrenamiento. De lo contrario, seguirá siendo una actividad saludable, pero no te permitirá alcanzar tus objetivos. Para que esto no te suceda, solo tienes que seguir los siguientes consejos:
Crea una rutina de varias sesiones
El secreto del éxito es la perseverancia. Además, si nunca has corrido de manera habitual, necesitarás algo de tiempo para adaptarte a la resistencia, aprender a respirar o a controlar el ritmo que llevas para poder cumplir con tus objetivos.
Es bastante probable que durante las primeras sesiones te quedes sin aliento, que te fallen las piernas o que tengas agujetas al día siguiente. Todo es normal y debes continuar adelante. No obstante, puedes buscar información sobre la respiración o las formas de trotar para aprender y progresar con más rapidez.
Lo ideal es que puedas salir a correr unas tres o cuatro veces por semana. En cuanto al tiempo, inicialmente céntrate en escuchar a tu cuerpo y en ir incrementándolo poco a poco. A medida que vayas mejorando tu forma física, podrás jugar entre correr a mayor velocidad o durante más tiempo.
Combina con entrenamientos de fuerza
Aunque no es imprescindible, si quieres correr para bajar de peso y ver resultados con más rapidez, combina las carreras con el entrenamiento de fuerza. Puedes hacerlo todo en una misma sesión. Por ejemplo, correr unos 20 minutos y después entrenar en casa con mancuernas, barra con discos o con tu propio peso. Todo dependerá del material que tengas en casa.
Si no, puedes alternar entre los días de la semana. Un día corres, y al siguiente haces fuerza, y al otro, vuelves a correr. Y si has elegido correr porque crees que puede ser eficaz para esos kilos de más, también puedes cambiarlo por subir y bajar escaleras o por cualquier otra actividad que sea cardio y con cierta intensidad.
En cualquier caso, combinar o alternar entrenamientos es siempre una buena idea, puesto que nuestro cuerpo tiende a habituarse con rapidez y deja de quemar calorías como al principio. Un truco es añadir sprints a las carreras o hacer intervalos.
Presta atención a tu alimentación
Como te decíamos al inicio, al correr para bajar de peso hay que tener en cuenta otros elementos más allá del ejercicio físico. La alimentación es uno de ellos, puesto que es el combustible que te permite rendir mejor.
Un error habitual es pensar que por el hecho de que se está haciendo deporte, ya se puede comer sin límites o prestando menos atención al tipo de alimentos. El problema está en que el entrenamiento incrementa la sensación de apetito y eso se convierte en un arma de doble filo.
Nuestro consejo es que evites la comida basura y apuestes siempre por frutas, verduras, legumbres y frutos secos como base de tu alimentación. Además, debes beber mucha agua; como mínimo dos litros, ya que al sudar más, te estarás deshidratando.
Descansa
Y por supuesto, todo no va a ser entrenar. Correr para bajar de peso también implica permitirle a nuestro cuerpo que se recupere. Pero cuidado, que eso no significa que cada vez que tengas algo de agujetas, debas estar varios días sin hacer nada. De hecho, realizar alguna actividad moderada acelera la recuperación.
A lo que nos referimos es que si un día el cansancio es muy alto porque has tenido una jornada intensa, no pasa nada por dejar la carrera para el día siguiente. Usa el sentido común y aprende a escuchar tu cuerpo.
Y si necesitas ayuda con tus entrenamientos, en Olimfit contamos con diferentes profesionales especializados en distintas ramas, como nutrición, médico deportivo o psicólogo. Además, tenemos clases en directo y grabadas para que realices cardio o rutinas de fuerza que complementen tu intención de correr para bajar de peso. ¡Te esperamos!