El progreso en fitness se puede verificar de diferentes formas. Sin embargo, solemos relacionarlo siempre con la pérdida de peso. Hoy te contamos cómo medirlo sin necesidad de pesarse constantemente.
¿Por qué no es fiable la báscula para medir el progreso en fitness?
Son pocos los hogares que no cuentan con una báscula en casa, sobre todo, en el caso de las mujeres. La sociedad nos bombardea con cuerpos perfectos sin las llamadas imperfecciones que son naturales en nuestra anatomía. Nuevas tendencias como el hueco entre los muslos, caderas con una forma determinada o vientres lisos como si no tuvieran un útero en su interior.
Todos ellos objetivos inalcanzables que nos condenan a pasarnos día sí y día también verificando cuánto pesamos. Pero, ¿sabías que tu peso no es un buen indicador del progreso en fitness? En primer lugar, tenemos al IMC (Índice de Masa Corporal), que es una medida que pone en relación el peso con la altura.
La fórmula es el peso dividido por la altura al cuadrado. El valor obtenido se compara con unos índices establecidos que indican si se está por debajo o por encima del peso recomendado o si bien está dentro de los márgenes adecuados.
Sin embargo, este indicador no es fiable, puesto que no tiene en cuenta la constitución de la persona o su estado. Y aquí llegamos al segundo punto, y es que el músculo pesa más que la grasa. Si has empezado a entrenar y por eso quieres medir tu progreso fitness, es probable que en vez de perder peso, puedas incluso ganarlo. Eso sí, hay que tener en cuenta si partimos de un sobrepeso o una obesidad y de cuáles son los objetivos que nos hemos marcado.
¿Cómo medir el progreso fitness sin la báscula?
Otra razón por la que no se recomienda el uso constante de la báscula es porque nos puede llevar a un TCA o Trastorno de la Conducta Alimentaria. Así que si quieres medir tu progreso fitness, tanto si deseas perder peso como si no, dispones de estas alternativas.
Hazte fotos
Si sigues cuentas de fitness en redes sociales como Instagram en las que se ofrecen packs de entrenamiento, seguro que has visto imágenes del antes y el después. Se trata de hacerte una foto con una ropa determinada o en ropa interior, y volver a hacértela en la misma postura un tiempo después. Por ejemplo, tres meses.
Para que sea realista, evita recurrir a los trucos frecuentes, como curvar la espalda o elevar el pecho. Piensa que es solo para ti y que el único objetivo es verificar que tu cuerpo está cambiando. Hazte fotos tanto de frente como de espalda y de perfil.
Toma referencias muy concretas
Si estás realizando entrenamiento de fuerza, te resultará sencillo medir tu progreso fitness. Solo tienes que tomar nota de los pesos que estás usando o del número de repeticiones que eres capaz de hacer. Si entrenas sin peso, estas últimas o el tiempo que tardas te pueden servir. Por ejemplo, cuánto tardas en completar 20 burpees o el número de flexiones con los pies apoyados que puedes hacer.
Usa una cinta métrica
Con una báscula, estás reduciendo el progreso a tu peso, cuando en realidad, la transformación es múltiple. Por ejemplo, tus hombros podrán crecer porque estarás trabajando el músculo. Al mismo tiempo, el contorno de la cintura se reducirá. Toma diferentes medidas y revísalas cuando compares las fotos del antes y el después.
Mide la grasa corporal
Si lo que te preocupa es quemar grasa, entonces solo tienes que medir cuáles son tus niveles concretos. Aunque hay básculas digitales con la función de medirla incorporada, si no quieres caer en la tentación de obsesionarte, también hay calibradores digitales. Tienen forma de pinza y te dirán en detalle cuáles son tus valores.
Prueba la ropa
En función del tipo de actividad que realices y la frecuencia, tu cuerpo se irá moldeando de una forma u otra. Si te fijas en deportistas de diferentes disciplinas, verás que unos tienen las piernas más desarrolladas, otros el torso, los hay con figuras más delgadas y otros que son pura potencia.
Con esto en cuenta, prueba tu ropa cada cierto tiempo. Es probable que la costura de los hombros te empiece a apretar o que los pantalones te queden sueltos en la cintura, pero que ahora tu glúteo ocupe más espacio.
Como ves, son múltiples las formas de verificar el progreso fitness. En Olimfit, te ofrecemos clases en directo y grabadas sin salir de casa, pero también otros servicios de salud complementarios, como nutricionista o médico deportivo. Con nuestro equipo, podrás alcanzar todos tus objetivos y medir cómo avanzas.